viernes, junio 30, 2023

¿Cómo perciben México y el mundo a Estados Unidos?

 


Por Rogelio Ríos Herrán

 

Me sorprendieron las conclusiones de una reciente encuesta del Pew Research Center (“International Views of Biden and U.S. Largely Positive” en @pewresearch) sobre la percepción internacional del presidente Biden y Estados Unidos, pues contra lo que yo pensaba, resultaron “ampliamente positivas”.

 

Por ejemplo, “en el tercer año de su presidencia, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, recibe críticas mayormente positivas de los públicos de todo el mundo”, afirman los autores de la encuesta.

 

En los 23 países encuestados por el Pew Research Center, un promedio de 54 por ciento expresó tener confianza en Biden contra un 39 por ciento que dijeron lo contrario.

 

Además, y esto es lo más sorprendente, un promedio de 54 por ciento de los encuestados le otorgó a Estados Unidos una evaluación favorable, incluyendo a siete de cada diez o más en Polonia, Israel, Corea del Sur, Nigeria, Japón y Kenia.

 

¿Por qué es sorprendente lo anterior? Recordemos que el presidente Biden accedió a la Casa Blanca tras la gestión de Donald Trump, quien regresó a su país a una época de aislacionismo agudo respecto al resto del mundo, como no se había visto desde la época de la Primera Guerra Mundial.

 

Las actitudes aislacionistas de Trump, sus desplantes diplomáticos y el discurso hostil contra sus aliados europeos, me hacían pensar que sería sumamente difícil para su sucesor remontar esa adversidad y regresar a su país a las percepciones positivas.

 

El presidente Biden parece haberlo logrado, no obstante las dificultades que enfrentó. La Hungría del populista Orban fue el único país entre los encuestados en donde menos de la mitad respondió favorablemente hacia Estados Unidos.

 

Sobre el tema de cuánto toma en cuenta Estados Unidos a otros países en la formulación de su política exterior, un asunto espinoso para la diplomacia estadounidense, “en aproximadamente la mitad de las naciones encuestadas, la proporción del público que cree que Estados Unidos sí considera a otros países es mayor de lo que ha sido desde que el Pew Research Center comenzó a hacer esta pregunta hace más de dos décadas”.

 

Otro resultado sorprendente fue el de México. Entre los mexicanos encuestados, el 63 por ciento tuvo una opinión favorable de Estados Unidos; durante la gestión de Trump, esa cifra era del 30 por ciento.

 

Además, los mexicanos manifestaron una confianza al Presidente Biden de 43 por ciento contra la bajísima cifra de 5 por ciento durante la presidencia de Trump. Las cifras hablan pos sí mismas.

 

Una lectura inmediata de los resultados de la encuesta es que, en el caso de México, no pegó realmente el discurso “antiyanqui” del presidente López Obrador, ni por supuesto su libro “¡Oye, Trump!”, publicado en 2017 (por Editorial Planeta con epílogo de Elena Poniatowska) cuando López Obrador era precandidato opositor a la presidencia mexicana.

 

Una vez en la presidencia, López Obrador ha lanzado andanadas verbales a Estados Unidos durante la gestión de Biden como no lo hizo durante la presidencia de Trump, pero, como vimos, no tuvieron mayor efecto entre los encuestados por el Pew Research Center.

 

Más al fondo, me parece que dejando a un lado las personalidades de Biden y Trump, los mexicanos perciben que en un mundo de incertidumbres (climáticas, económicas, geopolíticas y pandémicas) y de severas amenazas autoritarias (China, Rusia e Irán), ven en Estados Unidos no sólo a un socio comercial benéfico, sino a un referente central para la democracia, incluso con los defectos que el modelo norteamericano tiene.

 

Quien aspire a la presidencia de México en 2024 debe tomar en cuenta las percepciones de los mexicanos sobre Estados Unidos (63 por ciento con opinión favorable) y no aplicar en las decisiones de política exterior sus prejuicios y corazonadas, como desde 2018 ha sucedido desde la presidencia de la República con los resultados desastrosos que están a la vista: López Obrador, por ejemplo, es persona non grata en Perú por interferir en los asuntos internos de ese país. 

 

Si no procede con profesionalismo el próximo mandatario, México podría quedar a la deriva en la arena internacional en la peor época posible.

 

@rogeliux

 

El Pew Research Center (@pewresearch) es un centro de investigación sin fines de lucro que se dedica a informar al público sobre los problemas, actitudes y tendencias que dan forma a los Estados Unidos y el mundo. Realiza encuestas de opinión pública, investigaciones demográficas, análisis de contenido de medios y otras investigaciones empíricas de ciencias sociales. El centro no toma posiciones políticas y es una subsidiaria de The Pew Charitable Trusts.

 

 

jueves, junio 29, 2023

AMLO: lealtad e incompetencia

 


Por Rogelio Ríos Herrán  

 

Escuché hace años una conferencia del Dr. Peter H. Smith (politólogo de la Universidad de California en San Diego, UCSD) a estudiantes en El Colegio de México en torno a un tema que le apasionaba: el reclutamiento de cuadros (es decir, gobernantes y funcionarios) para el sistema político dominado, en ese entonces, por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), el cual resulta útil para entender el presente.

 

El sistema de reclutamiento implementado en la larga era priista funcionaba como un mecanismo de movilidad social para las clases media y baja. El requisito indispensable era contar con estudios universitarios en instituciones públicas (la UNAM de manera destacada) o privadas. 

 

Además de tener un título universitario, cada quien se labraba su futuro pegándosele a un padrino o mentor en el gobierno. La mezcla entre talento y lealtad estaba más o menos equilibrada en partes proporcionales: tenían que ser lo suficientemente listos para dar resultados en la función pública encomendada, pero lo suficientemente leales al padrino para compartir su poder y prestigio, además de riqueza. 

 

De esa manera, cada quien recibía beneficios: el PRI, que aceitaba su maquinaria imparable con los recién llegados; los políticos encumbrados, quienes tenían a su disposición la suficiente cantidad de “cuadros” para formar sus equipos de trabajo; y, por supuesto, los propios jóvenes profesionistas, para quienes se abrían oportunidades en la escalera del ascenso social. 

 

El problema con la Cuarta Transformación es que copió mal el sistema de reclutamiento de cuadros y ascenso social del PRI. No me explicó por qué lo copiaron mal quienes, cuando eran priistas (López Obrador entre ellos), lo aprovecharon de maravilla, pero ahora lo han pervertido hasta dejarlo inutilizado. 

 

La fórmula obradorista de “noventa por ciento de lealtad y diez por ciento de capacidad” trastocó profundamente el delicado equilibrio entre las proporciones de capacidad y lealtad del sistema priista. Por decirlo así: mataron a la gallina de los huevos de oro.

 

Al cerrar la Cuarta Transformación la escalera del ascenso social para la juventud universitaria, se interrumpió el manantial de talento nuevo de los “cuadros” recién llegados. 

 

Por tanto, el gobierno morenista solamente recicla de un lado a otro al mismo conjunto de personas sumamente leales, es verdad, pero también sumamente incompetentes. 

 

Si a ello sumamos otro grave error de la Cuarta Transformación, la cosa se pone color de hormiga: AMLO y los obradoristas rompieron la regla de oro de que, pase lo que pase, cada seis años se renovaba por completo el gobierno federal para dar paso a los que venían empujando desde abajo. Hoy, no quieren irse del poder ni dejarán llegar a nadie más. 

 

Ése era un entendimiento fundamental: se hacía corte sexenal, se iban los que estaban y daban paso a los que llegaban. “El que alcanzó, alcanzó”, diría el ranchero en el baile; “yo a mis hijas me las llevo.” 

El profesor Smith plasmó sus ideas en un libro de lectura necesaria para entender a la política en México, “Los laberintos del poder. El reclutamiento de las élites políticas en México, 1900-1971" (publicado en español por El Colegio de México, 1979), ideas que recogí a vuelapié en esta columna. 

 

Al rememorar su obra sobre México, supongo que el profesor emérito de UCSD estaría preocupado por las consecuencias del rompimiento del sistema y las prácticas de reclutamiento de los “cuadros” para el gobierno morenista. 

 

No hay propuesta alterna de los obradoristas para elegir atinadamente a sus cuadros, simplemente destruyeron lo que existía sin sustituirlo por algo mejor, práctica nefasta a la que nos tienen acostumbrados. 

 

Perdido en “los laberintos del poder”, parece que al presidente López Obrador le ha llegado la hora de pagar la elevada factura por haberse rodeado de incompetentes. 

 

La lealtad, incluso la de tipo incondicional y ciega, no lo salvará de entregar las malas cuentas de su gestión. 

 

@rogeliux 

 



 

viernes, junio 16, 2023

Alicia Bárcena: las manos atadas

 

 

Por Rogelio Ríos Herrán 

 

Casi al mismo tiempo, dos sentimientos me asaltaron al saber la noticia de la designación de Alicia Bárcena como la nueva Secretaria de Relaciones Exteriores (SRE) en el gobierno del presidente López Obrador. 

El primer reflejo fue de gusto por saber que una persona con su trayectoria y amplia experiencia en organismos internacionales (ONU y CEPAL) -una internacionalista de buena cepa- llevará en adelante los asuntos externos de México. 

El segundo reflejo, sin embargo, fue de inquietud: qué lástima que durante lo que será su corta gestión en la Cancillería tendrá las manos atadas, figurativa y literalmente hablando, por un presidente sumamente controlador. 

Además de Rosario Green en el gobierno de Zedillo y Patricia Espinosa durante el gobierno de Calderón, Alicia será la tercera mujer en ocupar el cargo.  

La vara, entonces, está alta para ella: no por Ebrard, sino por Green y Espinosa, mujeres que cumplieron a cabalidad con sus responsabilidades. Contra ellas habrá de compararse su gestión. 

A diferencia de las funcionarias de Zedillo y Calderón, la señora Bárcena no gozará del tiempo en el cargo (tres años de Green y seis años de Espinosa) ni de la libertad de acción que sus predecesoras tuvieron con sus jefes. López Obrador no le dará, ni de lejos, un margen de acción similar al de ellas. 

¿A qué va, entonces, Alicia Bárcena a la SRE?  

Dado el corto tiempo que le queda de aquí al fin del gobierno en septiembre de 2024, lo mejor que podrá lograr Bárcena será quizá, si se aplica y se lo permite el presidente, arreglar en lo posible la dañada relación bilateral México-Estados Unidos. Y párele de contar. 

Por cierto, a Rosario Green le tocó una contraparte femenina, Madeleine Albright, en el Departamento de Estado (con el presidente Clinton). A Patricia Espinosa le tocaron nada menos que dos mujeres: Condoleezza Rice (con el presidente Bush) y Hillary Clinton (con el presidente Obama).  

En ambos casos, de esas relaciones de trabajo surgieron lazos de amistad permanentes entre las funcionarias mexicanas y estadounidenses. 

Bárcena lidiará con Anthony BlinkenSecretario de Estado norteamericano, quien ya la saludó con empatía y elogios en reconocimiento a su alto perfil personal y amplia trayectoria profesional en el Sistema de Naciones Unidas. 

En otras áreas distintas a la relación bilateral, la Secretaria Bárcena hará una labor de apagafuegos en donde ello sea posible: la declaración en Perú de persona non grata al presidente López Obrador, la ambigua postura de México ante la agresión rusa a Ucrania, el incumplimiento mexicano de los objetivos climáticos del Acuerdo de París, el silencio ominoso de la diplomacia mexicana ante Daniel Ortega en Nicaragua, la revisión de la relación con Cuba y Venezuela, etcétera. 

Lo primordial, sin embargo, es la relación con Estados Unidos, ante la cual habrá que enfrentar desafíos inmediatos, entre ellos: 

  1. La retirada de la demanda presentada por el gobierno de México señalando el tráfico de armas hacia México con el fin de eliminar un punto innecesario de fricción bilateral. 

  2. La urgentísima atención (junto con la Secretaria de Economía Raquel Buenrostro) a las dos disputas comerciales que están en la etapa avanzada de consultas antes de la instalación de paneles de arbitraje: uno sobre granos transgénicos y otro sobre la política energética de México. Los fallos adversos le costarían miles de millones de dólares a México. 

  1. Revertir el desapego del presidente López Obrador ante el presidente Biden y su pública simpatía hacia Donald Trump, personaje que socava constantemente a la democracia estadounidense. 

En fin, la llegada de Alicia Bárcena me recuerda a esas situaciones en las que los reclutadores le decían al entrevistado, ansioso por encontrar chamba de lo que fuera, que estaba lleno de virtudes y capacidades, pero “sobrecalificado” para el puesto. 

La señora Bárcena trabajó en el pasado con figuras como Koffi Annan y Ban Ki-moon, secretarios generales de la ONU excepcionales que conformaron equipos de trabajo de alto nivel a su alrededor. 

Por Dios, trabajar con el presidente López Obrador será para ella como tratar con el dueño de la tiendita de la esquina, quien todo lo decide a su leal saber y entender y no permite que le lleven la contraria. 

¿No estará “sobrecalificada” para su patrón? ¿Está ella consciente de los señalamientos a la integridad de López Obrador y sobre los casos de corrupción emblemáticos (SEGALMEX, por ejemplo) del gobierno en el que va a colaborar con su trabajo y reputación?  

Le deseo sinceramente buena suerte, doña Alicia, en la tiendita de la Cuarta Transformación. 

@rogeliux 

viernes, junio 09, 2023

Katherine Tai: la batalla del maíz


Por Rogelio Ríos Herrán 

Entretenidas las tribus aztecas con las elecciones de Coahuila y Edomex, además de las peripecias de la sucesión presidencial, se les pasó desapercibida lo que yo considero una nota fundamental para el 2024.

 

La titular de la Oficina del Representante de Estados Unidos (USTR, por sus siglas en inglés), Katherine Tai, solicitó formalmente el 2 de junio la apertura de consultas sobre la prohibición del presidente López Obrador de importar maíz transgénico para consumo humano desde Estados Unidos, establecida en un decreto de septiembre de 2020 y refrendada en otro decreto de febrero de este año.

 

“Estados Unidos ha establecido repetidamente su preocupación de que las políticas biotecnológicas de México no se basan en la ciencia y amenazan con interrumpir las exportaciones estadounidenses a México”, expresó Tai en declaraciones recogidas por el periódico El Norte.

 

En el año 2022, el valor de esas exportaciones alcanzó la cifra récord de 4 mil 920 millones de dólares, en una proporción de 90 por ciento de maíz transgénico para forraje y el 10 por ciento restante para consumo humano.

 

Tai y su gobierno consideran que los decretos que restringen la importación de grano transgénico a México son violatorios del marco del TMEC, específicamente del capítulo 2 (acceso al mercado) y 9 (regulaciones fitosanitarias).

 

La Sra. Tai es una funcionaria eficiente, dura negociadora, conocedora a fondo de las cuestiones comerciales y defensora a ultranza del interés nacional de su país.

 

A ella le ha tocado sentarse a la mesa de negociaciones con dos equipos de la Secretaría de Economía mexicana: el anterior de Tatiana Clouthier y el actual de Raquel Buenrostro.

 

A pesar de las largas e intensas negociaciones entre la Sra. Tai y los equipos mexicanos, la cuestión de las trabas del gobierno mexicano a la entrada de maíz transgénico a México, expresadas en dos decretos presidenciales, no ha sido resuelta.

 

El gobierno americano le pide a su contraparte mexicana que fundamente de manera científica su oposición al maíz transgénico. Los funcionarios mexicanos, puestos entre la espada y la pared, no pueden traducir en lenguaje científico las obsesiones y prejuicios del presidente López Obrador en torno al maíz transgénico.

 

Buenrostro, la actual Secretaria de Economía, por ejemplo, comentó en febrero que “el diferendo de Estados Unidos sobre el decreto que regula el maíz transgénico carece de fundamentos comerciales. Su motivación en realidad es política.”

 

El Gobierno de Canadá anunció también que se suma a la preocupación de los estadounidenses por la postura del gobierno mexicano, al expresar que “Canadá comparte la preocupación de Estados Unidos de que las medidas de México no están respaldadas científicamente y pueden perturbar innecesariamente el comercio en el mercado norteamericano”, según un comunicado emitido el 9 de junio por Marie-Claude Bibeau (Ministra de Agricultura) y Mary Ng (Ministra de Comercio Internacional).

 

Además de maíz, los canadienses exportan sobre todo canola transgénica al mercado mexicano. ¿Le dirá también la Secretaria Buenrostro a los canadienses que su motivación es política?

 

Si las consultas formales no prosperan en 75 días con los vecinos del norte, el siguiente paso es la instalación de paneles de disputa comercial cuya decisión será inapelable. 

 

De perder las disputas, México enfrentaría la imposición de aranceles a sus exportaciones agrícolas. La decisión final se daría en aproximadamente seis meses, a inicio del 2024, en plena efervescencia electoral en nuestro país.

 

Eso no es todo. Si a las disputas por el maíz transgénico se agrega otra disputa comercial más por el sector energético y las afectaciones comerciales reclamadas por Estados Unidos y Canadá (solicitadas desde julio del 2022), el gobierno mexicano estaría pagando, antes de las elecciones del 2024, la enorme factura comercial por las decisiones tomadas por el presidente López Obrador que resultan contrarias al marco del TMEC.

 

No hablamos solamente de disputas comerciales y aranceles por miles de millones de dólares. Es algo más que eso. 

 

En el fondo, se trata de una cuestión básica: ¿respetará o no el gobierno mexicano las reglas y el espíritu del TMEC? ¿Desea el presidente López Obrador o no permanecer en el mercado común con Estados Unidos y Canadá?

 

Si México quiere seguir en el TMEC, ¿por qué su gobierno envía las señales equivocadas a sus socios comerciales?


@rogeliux

domingo, junio 04, 2023

Coahuila y EDOMEX: por el voto limpio

 




Por Rogelio Ríos Herrán

 

Como periodista y columnista, desde Nuevo León hago un llamado a los ciudadanos coahuilenses y mexiquenses a salir a votar este domingo 4 de junio y a poner a sus estados como un ejemplo a seguir por el resto de México.

 

La mayor participación cívica posible en las jornadas electorales en Coahuila y el Estado de México es la mejor medicina contra los males que aquejan a nuestra “frágil democracia” (como la llama José Woldenberg) y que se derivan en buena medida del abstencionismo.

 

En el momento en que los ciudadanos coahuilenses y mexiquenses acudan a las urnas  a votar se darán cuenta que su voto es la única herramienta de que disponen para castigar o premiar a sus gobernantes y candidatos.

 

Ahí, en la intimidad de la urna, cada uno de ustedes será libre de decidir por tal o cual candidato de éste u otro partido político.

 

Cruzar una boleta electoral para mostrar nuestra preferencia política es una de las mayores satisfacciones que los ciudadanos podemos sentir en la vida pública, ¿por qué privarse de un acto tan satisfactorio? ¿Cuánto perdemos los ciudadanos cuando nos abstenemos de votar?

 

Para cumplir esta circunstancia, sin embargo, su voto debe ser limpio. No estar sujeto a condiciones ni amenazas de gobernantes, a descuentos en sus salarios, a retiros de los programas sociales.

 

No hay mucha protección contra la propaganda y la manipulación políticas para los ciudadanos, es verdad.

 

Esa marea de anuncios y spots con imágenes y voces de los candidatos se termina, sin embargo, al ingresar a la urna, cruzar el voto y depositarlo. Nadie puede romper su intimidad cívica. Ese espacio es libre para manifestar su voluntad política.

 

No importa qué les prometan, amigos coahuilenses y mexiquenses, o cuáles amenazas les señalen: ustedes, y sólo ustedes, van a tomar la decisión importantísima de a qué candidato van a apoyar.

 

A eso le llamo el “voto limpio”, el que no tiene condicionamientos ni cadenas que lo aten. Es el voto de conciencia, personal y voluntario. 

 

El “voto sucio”, estará presente también, desafortunadamente, este domingo 4 de junio. Es el voto forzado sobre los ciudadanos amenazados de perder empleos, salarios y apoyos sociales. Es un voto distorsionado por la manipulación política que fomenta el fanatismo en muchas personas.

 

El “voto sucio” puede ser derrotado por el “voto limpio” si la participación ciudadana es elevada. El abstencionismo favorece al “voto sucio”; la participación elevada de los ciudadanos en la votación favorece al “voto limpio”.

 

¡Ánimo, ciudadanos coahuilenses y mexiquenses! ¡Pongan el ejemplo a todo México! Los observamos desde toda la República con simpatía e interés a ustedes que habitan en dos estados industriosos y llenos de gente trabajadora y emprendedora que son dos orgullos nacionales.

 

¡A votar, paisanos!

 

@rogeliux 

viernes, junio 02, 2023

Fuerza Civil: ¿No tomar prisioneros?



Por Rogelio Ríos Herrán

 

Me pareció sumamente preocupante ver en los diarios de Nuevo León, el día 30 de mayo, la cobertura sobre el enfrentamiento el día anterior entre elementos de la Fuerza Civil (la policía estatal nuevoleonesa) y miembros de una banda criminal, en el cual el resultado fue la liquidación de nada menos que 10 elementos criminales.

 

¿Por qué me inquieta eso? Con la información pública disponible, me salta a la vista que el número de muertos fue elevado y que ningún elemento criminal fuera capturado con vida y sujeto a interrogatorios e investigaciones. Los muertos no hablan; los heridos o detenidos sí proporcionan información.

 

A lo largo de los últimos meses, la Fuerza Civil ha sufrido ataques de grupos delincuenciales, es verdad, con pérdida mortal de algunos de sus elementos y daños a sus instalaciones, pero ¿va a contestar la fuerza pública con la misma moneda a los delincuentes?

 

Si la instrucción es “no tomar prisioneros”, como en las películas, entonces las autoridades estatales se van a meter en un grave problema que aqueja al Ejército y la Marina federales: la letalidad desproporcionada de sus acciones en contra de los criminales.

 

El periódico El Norte dio (30/05/2023) la siguiente información sobre el tema: “De acuerdo con el reporte oficial más reciente, durante mayo se reportaban 16 presuntos delincuentes abatidos en Nuevo León, de los que 15 cayeron al enfrentarse con Fuerza Civil y uno más con policías de Anáhuac. En lo que va del año sumaban 28 supuestos criminales muertos, siendo 24 abatidos por elementos estatales, dos por la Guardia Nacional, uno por policías de Apodaca y el restante por agentes de Anáhuac”.

 

La tendencia de abatir más delincuentes y capturar menos prisioneros viene desde el año pasado. El mismo medio ha mencionado municipios conflictivos para Fuerza Civil: Anáhuac, Doctor Coss, Cerralvo, General Bravo, China, García y Los Herreras.

 

En China, por ejemplo, entre el 4 de agosto y el 16 de octubre del 2022 hubo 10 delincuentes abatidos por la Fuerza Civil. Es decir, 10 muertos en dos meses contra 10 muertos en un día sobre la Autopista Monterrey-Nuevo Laredo.

 

La sombra de la alta letalidad (acción mortífera) de las fuerzas armadas y de seguridad se cierne sobre la Fuerza Civil de Nuevo León, sus estrategias y protocolos.

 

De la alta letalidad a la abierta violación de los derechos humanos no hay más que un paso, tal como lo han dado elementos de la Marina y el Ejército: entre la acción de fuerza legítima y las ejecuciones extrajudiciales hay una frontera que jamás debería cruzarse.

 

Hasta agosto de 2022, durante el gobierno de López Obrador los militares habían “abatido” o matado a 739 presuntos delincuentes y herido a 135, según nota de El País (Elena Reyna, 20/10/2022). Por cada agresor herido hay cinco que mueren en enfrentamientos con el Ejército, una letalidad alarmante, asienta el diario español.

 

En una nota del portal infobae.com (Antonio San Juan 01/05/2022) se expresa que en el gobierno de AMLO  “la Sedena ha establecido un modelo distinto a los estándares internacionales para evaluar el uso de la fuerza letal… los militares mataron a más de los que arrestaron”.

 

Catalina Pérez Correa, investigadora del CIDE, mencionó a ese medio que las autoridades no siguen estándares internacionales para determinar la letalidad porque suman heridos y detenidos: el Ejército debería obtener la relación únicamente entre fallecidos y lesionados para obtener la medida correcta. 

 

Propone Pérez Correa que sea un organismo independiente el que mida la letalidad y establezca criterios para distinguir entre el uso y el abuso de la fuerza por parte de las autoridades (una buena idea también para Nuevo León). 

 

Refiere también la investigadora que la Cruz Roja Internacional maneja estándares de cuatro heridos por cada persona fallecida en un conflicto bélico, según el tipo de armamento y el sitio de los enfrentamientos.

 

¿Por qué han subido los índices de letalidad?, se pregunta el general retirado José Francisco Gallardo en una entrevista en 2019 (nota en mucd.org.mx, 09/07/2019, “Mayor índice de letalidad en acciones de la Marina”). 

 

“Se debe a las políticas de mando que nadie les va a decir, pero las conocemos, incluso cuando el asunto de Tlatlaya (22 civiles asesinados bajo órdenes superiores por militares del 108 Batallón de Infantería en el Estado de México en 2014) son emblemáticos los documentos que se ventilaron en el caso… aquí lo que se tiene que hacer es una revisión de todas estas políticas que tienen que ver ahora con la seguridad pública en la actuación de las Fuerzas Armadas, ahora con la Guardia Nacional que es el Ejército con otro nombre”, dijo Gallardo.

 

Pesa en el ánimo de los elementos de Fuerza Civil, como del Ejército y la Marina, la tragedia de los compañeros caídos en el cumplimiento de su deber, lo entiendo. 

 

En cualquier caso, sin embargo, el interés público exige el mayor estándar ético a cualquier miembro de las fuerzas armadas que tenga en sus manos la decisión entre la vida y la muerte de alguien más, delincuente o no.

 

¿Hacia qué rumbo va la Fuerza Civil de Nuevo León, nacida con los mejores presagios para los nuevoleoneses? ¿No tomar prisioneros? Las cifras de su letalidad nos lo dirán.

 

@rogeliux

 

AMLO: la fatiga del poder

  Por Rogelio Ríos Herrán  Al poco tiempo de empezar las conferencias matutinas (“las mañaneras”) en el arranque del gobierno de López Obra...