martes, noviembre 28, 2017

Adiós, Rosario



Por Rogelio Ríos Herrán

Muchas maneras habrá de honrar la memoria de Rosario Green (1941-2017), de hablar sobre su larga trayectoria diplomática y sus logros en la ONU, pero prefiero recordarla en el salón de clases cuando yo estudiaba la carrera de Relaciones Internacionales en El Colegio de México (entre 1977 y 1981).

Apasionada de su cátedra, conocedora profunda de América Latina, en su curso sobre los problemas contemporáneos latinoamericanos nos revelaba su dominio total del tema, pero con un plus que todo buen maestro sabe dar: su involucramiento a fondo, su compromiso por hacernos conocer, leer profusamente, tener herramientas para discutir sobre una región que es, además de objeto de estudio, nada menos que nuestra propia casa, el lugar común que compartimos los latinoamericanos.

Nunca le alcanzaba el tiempo normal de la clase para acabar de abordar y comentar los problemas latinoamericanos. Invariablemente, nos pedía al final de cada sesión “¡Cinco minutitos, muchachos!” para redondear sus ideas, los cuales, también invariablemente, se extendían a 10 ó 15 minutos. Jamás me pesó quedarme esos 15 minutos extras en el salón, al contrario, a veces continuábamos la plática en la cafetería.

Rosario tenía el toque humano hacia sus alumnos, sabía cómo conectar con nosotros, venía de Ciencias Políticas de la UNAM, le brotaba la conciencia política por todos sus poros, en fin, yo no sé de dónde la salía tanta energía.

Por eso me dolió mucho la noticia de su partida, porque se murió mi maestra querida que me hizo aprender tantas cosas y a mirar a América Latina de una manera conocedora e involucrada y nos dio la dosis adecuada para acercar esos extremos.

Muchos años después, escribí -en una de las columnas que yo publicaba en el periódico El Norte- sobre Claude Heller, esposo y compañero de vida de Rosario, cuando Heller fue Representante Permanente de México ante las Naciones Unidas, a propósito de una intervención del embajador mexicano en el Consejo de Seguridad. 

Para mi grata sorpresa, Rosario me escribió unas líneas de agradecimiento sobre mi artículo y me comentó sobre una labor muy interesante en la que ella participaba junto con otras mujeres que habían destacado en la diplomacia y el servicio público de sus países, aquí las reproduzco:

From: Rosario Green
Sent: Jueves, 04 de Diciembre de 2008 01:17 PM
To: Editorialistas El Norte
Subject: Cartas A ELNORTE


Rogelio, me gustó tu artículo. Te añado un dato, Madeleine Albright fundó cuando terminó su mandato, un mecanismo cobijado por el Aspen Institute que anualmente reúne a los ex cancilleres que compartimos mandato. Esto nos ha permitido a un grupo de cerca de 20, mantener un contacto y una amistad que creo que todos apreciamos mucho. Este año nos reunimos en Copenhage y el año que entra será en Estambul. No es una reunión social sino de trabajo y hemos abordado diversos e importantes temas como cambio climático y seguridad, y conseguimos espacio en algún importante diario como el NYTimes o el Washington Post y publicamos un op ed al respecto.
Un saludo, Rosario.

De ese nivel eras, Rosario. Muchas gracias por tus lecciones en el aula y fuera de ella. Adiós, maestra.

rogelio.rios60@gmail.com



domingo, noviembre 19, 2017

Bonn, las ganas de avanzar



Por ROGELIO RÍOS HERRÁN

Bien dijo Angela Merkel, la Canciller alemana, durante la reunión sobre cambio climático de la ONU de este año (concluida el 18 de noviembre) que este tema “es un asunto que determina nuestro destino como humanidad”.

A ello agregaría yo lo dicho por la mexicana Patricia Espinosa, secretaria ejecutiva de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático, en el sentido de que “hay un apoyo unánime al pacto global de lucha contra el cambio climático”. Pero agregó: “Necesitamos más acción y mayor ambición, y las necesitamos ya”.

Una “hoja de ruta” sobre las acciones a seguir y el establecimiento de un “diálogo facilitador” (Diálogo de Talanoa, nombrado así por la tradición de negociación y diálogo en Fiji y las islas del Pacífico) por los gobiernos reunidos en Bonn, Alemania, para la conferencia denominada COP 23 Fiji (presidida por esta nación isleña) ha sido el resultado de una reunión en donde se reconoció que, si bien hay esfuerzos en marcha, éstos no han sido suficientes para acercar a los países a las metas propuestas de disminución de emisiones de carbono.

Por ello la importancia de medir mediante los mecanismos convenidos los avances de cada país y verificarlos constantemente a través de reuniones como la de Bonn y mediante el trabajo permanente de los funcionarios de la Convención Marco.

La tarea es complicada, pero se puede llevar a cabo de mejor manera en un marco multilateral como el de las Naciones Unidas que propicia la asociación de países en alianzas para combatir el cambio climático. No hay lugar para lobos solitarios.

México, por ejemplo, junto con Corea del Sur, Mónaco, Suiza, Liechtenstein y próximamente Georgia, participa en el denominado Grupo de Integridad Ambiental comprometido con alcanzar sus metas de disminución de emisiones de carbono para el 2030 en el marco de Naciones Unidas.

La cobertura mediática de la reunión nos habla del reconocimiento de que la mayoría de los países se están “quedando cortos” en su esfuerzo por disminuir las emisiones de carbono. Se señalaron desacuerdos añejos sobre los elevados costos de la transición hacia energías limpias para países subdesarrollados, la mayor responsabilidad que deben asumir los países desarrollados, etcétera.

Pero no obstante los desacuerdos, es alentador constatar que el foro de Naciones Unidas es muy útil para estas discusiones y que el Acuerdo de París 2015 no sólo sigue vigente, sino que ya se transformó en un mecanismo dinámico con protocolos, metas y mediciones sobre sus avances. 

A pesar de los puntos de vista encontrados entre algunas naciones, pesó más la percepción de la magnitud de la amenaza del cambio climático sobre el planeta. Un gran paso.

Fue la propia Merkel quien reconoció que Alemania es de los que se están “quedando cortos” en cuanto a cumplimiento de metas, para no dejar dudas de que lo que se requiere para enfrentar este problema es una firme voluntad de reconocer las carencias, pero sin perder la visión a largo plazo.

El Gobierno mexicano anunció que como parte de sus acciones se designará próximamente el Parque Nacional Revillagigedo (en las Islas Revillagigedo que ya fueron consideras patrimonio mundial natural por la Unesco en 2016) como zona marítima protegida (con la prohibición de la pesca) con una extensión de 14.8 millones de hectáreas, el mayor de su tipo en América del Norte, según dijo en la reunión Rafael Pacchiano, Secretario del Medio Ambiente y Recursos Naturales.

La transición de las energías fósiles hacia las energías alternativas limpias está en marcha. Sabemos ya que el cambio climático es un problema no solamente de origen natural, sino agravado por la interferencia del hombre. El avance hacia una nueva era energética sin combustibles fósiles será costoso y gradual, pero es inevitable. 

Todo eso ya es sabiduría compartida sobre el cambio climático por las naciones reunidas en Bonn, en donde podemos aplaudir que se exhibieron las ganas de avanzar. Que nada nos detenga en esa ruta.

rogelio.rios60@gmail.com

  




sábado, noviembre 11, 2017

Palabras y misiles

Madeleine Albright. Fuente: Google.com

Muy buen consejo sobre diplomacia de una experta:

“The purpose of foreign policy is to influence the policies and actions of other nations in a way that serves your interests and values. The tools available include everything from kind words to cruise missiles. Mixing them properly and with sufficient patience is the art of diplomacy. The challenge is often greatest when the goal is to push or pull a country across the line separating international scofflaws from respectable members of the world community. I faced such challenges repeatedly as Secretary of State, especially when dealing with a turbulent Iran, a stubborn Libya, and a repressed Cuba.”

Madeleine Albright, Secretaria de Estado de los Estados Unidos 1977-2001

From “Madame Secretary. A Memoir.” New York: Miramax Books, 2003, p.319.

Nahuel, fútbol y políticos: adiós “fair play”

  Por Rogelio Ríos Herrán En México, el fútbol precede a la política en el triste arte de no respetar a los demás contendientes, violar las ...